Cuando un fundador y máximo accionista se desprende de acciones de la compañía que ha fundado, el mercado suele responder con cautela. En este caso, parece que los accionistas han visto con muy buenos ojos el movimiento y tanto Playtech como el propio Teddy Sagi están de enhorabuena.
Sagi se aleja de la barrera del 20% y se queda con un 17.8% de las acciones de la compañía por lo que podrá centrarse en diversificar su cartera y priorizar actividades relacionadas con inversiones en empresas emergentes que empiezan a cotizar en Reino Unido como es el caso del proveedor de pagos
SafeCharge y
Adtech Crossridertal como él mismo ha declarado; por su parte
Playtech -que ya vió como
Sagi vendía el 12% de la empresa hace años consiguiendo por ello unos 330 millones de libras- tras dar consentimiento a la operación consigue una mayor independencia a la hora de tomar decisiones ya que su Consejo de Administración recupetará parte de los pivilegios que aún poseía
Sagi como máximo accionista, por ejemplo el poder nombrar a dos consejeros a voluntad.
El mercado ha respondido en primera instancia con una rebaja en el precio de la acción, pero ya ayer jueves se recuperaba el valor y se mostraba la confianza del accionista tras esta operación.
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