1)
Impacto directo en la Bolsa: si bien es cierto que la primera reacción a lo acontecido ayer noche en el Parlament Autonómico fue que los futuros del IBEX-35 subieron un 2%, lo cierto es que el Ibex cedió un 0,92% y se espera que la tendencia a la baja se mantenga en los próximos días. La pérdida de valor de empresas cotizadas es una de las consecuencias más evidente del proceso separatista en Cataluña.
2) La
situación del sector bancario para la Industria del Juego es también fundamental. Parece que tras la suspensión temporal de la independencia de Cataluña, bancos como el BBVA o el Santander pueden mantenerse o subir, mientras que Caixabank o Banco Sabadell seguirían atravesando por una inestabilidad evidente. Un signo de ésto sería que los ADR (la fórmula que tienen las empresas con presencia en Estados Unidos de contar con un título físico que respalda el depósito en un banco estadounidense de las acciones que cotizan fuera) de Santander y BBVA subían más de un 3% esta misma madrugada.
3)
Huída de empresas: aunque dificilmente se va a acentuar de forma drástica el cambio de sedes sociales en las próximas horas, sabemos que compañías cotizadas por valor de unos 80.000 millones de euros ya han decidido trasladarse en los últimos días ante la inseguridad jurídica que despertaba la posible declaración unilateral: CaixaBank, que traslada su sede a Valencia; el grupo Caixa, que lo mueve a Palma de Mallorca; Banco Sabadell, que ha optado por Alicante; así como Gas Natural, Abertis, Cellnex, Colonial, Oryzon, Adeslas, VidaCaixa, Catalana Occidente, o Edreams, entre otras, que asientan su sede en Madrid.
Otras, como Freixenet, Codorniú, Grifols o el Grupo Planeta ya están confirmando su traslado de sede social, algo que sigue preocupando en Cataluña.
4)
Inestabilidad social: la fractura sigue igual y no tiene visos de solucionarse a medio plazo, más aún cuando por ahora no se vislumbran elecciones. El papel de la CUP en las próximas horas y la reacción de sus bases -decepción- se antojan clave para saber cómo va a reaccionar la sociead catalana. Huelgas convocadas por sindicatos pro-independentistas o un aumento de la actividad revindicativa en las calles podrían ser una realidad en estos días.
Por ahora sabemos que desde ayer, las Fuerzas de Seguridad del Estado están blindando las principales infraestructuras críticas de Cataluña para impedir que grupos organizados, especialmente próximos a la CUP, tomen por la fuerza el control de los mismos alentados por el distanciamiento con el propio President de la Generalitat, acusado por este sector de "traidor".
5)
Consumo: es evidente que "el Procés" entra en un limbo que no reduce el temor de empresarios, pero tampoco de ahorradores, que ven cómo si las empresas toman medidas preventivas, como el cambio de domicilio social, aunque los depositantes aparentemente puedan estar perfectamente tranquilos colaboran en una "fuga de capitales y depósitos" además de ver frenado su volumen de consumo debido a la incertidumbre.
Los rumores lanzados por círculos independentistas de imponer un corralito sobre los ahorros de los catalanes para evitar una fuga de capitales tampoco contribuyen a minimizar el nerviosismo del ahorrador.
6)
Peligra la financiación: en este contexto, uno de los principales desafíos que afronta Cataluña estos días es su dificultad para acceder a financiación en los mercados debido principalmente a su alta dependencia del Estado central, que ha pasado además a controlar sus cuentas tras el desafío legislativo que supuso aprobar la celebración del referendum.
7) Alarma en la
evolución de los principales indicadores económicos: existe una enorme preocupación por que los indicadores claves que sirven para definir la situación de Cataluña caigan en picado: la evolución en los gráficos sobre ocupacuón y paro, inflación, déficit, PIB y deuda pública serán clave en los próximos días para analizar el conflicto.
8)
Proyectos en marcha en el sector: tanto la financiación cómo permisos, licencias y modificaciones legislativas que afectan directa o indirectamente al sector del juego en Cataluña estarían pasando a un segundo o tercer plano atendiendo a las circunstancias. El proyecto Hard Rock Entertainment World (Barcelona World) que debería ubicarse en Vila-seca y Salou es el ejemplo paradigmático de cómo afecta esta situación al sector. Proyectos como un gran complejo de ocio y el papel de Cataluña cómo destino turístico líder en Europa están ahora en entredicho.
Ya sabíamos que la CUP ha mostrado siempre su rechazo más explícito al proyecto BCNWorld y Carles Puigdemont y sus consejeros tuvieron que eliminar el proyecto de los presupuestos para lograr la luz verde de los anticapitalistas a las cuentas de la comunidad el pasado año, así que es de suponer que lo sucedido con este proyecto se extendería a otras iniciativas sectoriales similares.
9)
Incertidumbre en el mundo del deporte: la Ley Nacional del Deporte es clara en lo que respecta a cambios en el mapa autonómico español. Ningún club o equipo catalán podría participar en una liga nacional ya que pertenecerían a otro Estado, y según se han encargado de informar instituciones privadas como la LFP o públicas como el Consejo Superior de Deportes, la separación Cataluña-España provocaría un enorme impacto para los clubes pero también las competiciones ya que las "Sociedades Anónimas Deportivas y Clubes que participen en una competición profesional deberán inscribirse en el Registro de Asociaciones Deportivas correspondiente y en la Federación respectiva", algo que no ocurriría si las Federaciones Catalanas aprobaran el documento de declaración de independencia firmado ayer en el Parlament.
10) También en un contexto deportivo pero con connotaciones muy especiales, encontramos una tesis que planea sobre varios ambientes del mundo del fútbol en Barcelona: el más que posible adiós de Messi del FC Barcelona en caso de declararse la independencia. Según se informa en
algunos medios, como LibertadDigital, éste sería el motivo por el cuál el argentino no ha renovado su contrato con el club culé. También se cita en el artículo que Messi se opuso a la decisión de Piqué y miembros de la directiva a no jugar el partido que hace dos semanas enfrentaba a FC Barcelona y Las Palmas. Es evidente que un jugador que aspira a convertirse en el mejor futbolista de la historia no podría cumplir ciertos objetivos deportivos si -como ha declarado en varias ocasiones Javier Tebas- el FC Barcelona tuviera que salir de LaLiga en caso de independencia.
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