Poco antes de Navidad, el grupo checo Sazka logró su objetivo: con un 34 por ciento, puede convertirse en el mayor accionista individual de Casinos Austria AG (Casag). En diciembre, el grupo recibió todas las aprobaciones reglamentarias requeridas para hacerlo: las autoridades de juegos han declarado que son "adecuadas". Ahora el grupo también puede hacerse cargo del 22,7 por ciento de las acciones en la propiedad estatal Casag, que el grupo Raiffeisen Leipnik Lundenburger (LLI) y la aseguradora Uniqa le venden.
Los checos, por lo tanto, tendrán el 34 por ciento de la compañía de juegos de azar, por delante de la tenencia estatal de Öbib con un 33,24 por ciento, y antes del competidor de Casag, Novomatic, con un 17 por ciento. El resto de la compañía está en manos de accionistas privados.
La semana pasada, el Ministerio de Finanzas responsable del juego austríaco en Viena dio el visto bueno para la entrada de los checos. La autoridad no tenía "objeciones" al nuevo propietario mayoritario. Novomatic pretendía conseguir más del 40 por ciento.
El acuerdo con los checos se decidirá el 15 de enero de 2018. Para este día, se invitó a una reunión general extraordinaria en la sede de Casinos AG en Wien-Landstraße. El único punto del orden del día de la asamblea de accionistas: "Aprobación de la transferencia de acciones" de las empresas que transfieren a Came Holding.
Con un 34 por ciento, el apetito del nuevo propietario mayoritario de la empresa de apuestas todavía no está satisfecho. Ya en otoño, anunciaron que buscaban "control exclusivo" sobre Casinos AG, es decir, más del 50 por ciento. Cómo quieren lograr este objetivo, aún no se conoce: Ni Novomatic ni el estado Öbib (o el entonces gobierno) quisieron desprenderse de las últimas acciones.
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