Los 38.000 monegascos que residen en menos de 2,02 kilómetros cuadrados, obligan a soluciones imaginativas como la que aporta el proyecto Portier Cove
Destinado a ver la luz en 2025, algunos ya lo han bautizado como la Bahía de los millonarios. 60.000 metros cuadrados que serán ganados al Mediterráneo gracias a unos 400.000 metros cúbicos de sedimento marino retirado para que se acometa el inicio de Portier Cove, nombre que recibirá este eco-vecindario que recibirá toneladas de arena siciliana en su fase definitiva, aquella en la que lugares clásicos como el Fórum Grimaldi o el Casino de Montecarlo modificarán invariablemente sus vistas.
Si nunca ha estado, James Bond puede corroborar en alguna de sus 3 películas rodadas ahí lo que les decimos desde Infoplay; lo que verán es el “antes”, para el “después” aún queda.
Portier Cove también aportará nuevos servicios al segundo país más pequeño del planeta (el Vaticano lidera ese ránking); como un aparcamiento público, un parque ajardinado, una marina y otros ornamentos a lo largo de un nuevo paseo marítimo. A pesar de la espectacularidad del proyecto, no es ni mucho menos novedoso para los monegascos lo de ganar terreno al mar; se estima que un 20% de su extensión ya procede de esa vía.
Bouygues Construction es quién pone el sello a tan espectacular obra, que supondrá en un horizonte temporal de diez años la creación de 120 apartamentos de lujo colindantes con el Casino de Montecarlo. El sello ecológico no es gratuito; reubicarán todas las plantas marinas y protegerán a la fauna autóctona para minimizar el impacto ambiental del proyecto, incluso crearán un arrecife artificial para facilitar y fomentar aún más diversidad marina en esa porción del Mediterráneo.
Con todo y con ello, el paisaje no será el mismo cuando se asome por la ventana del Casino de Montecarlo, triunfante a ser posible. Habrá 1000 nuevos y lujosos vecinos. Y un grupo privado que se va a hacer de oro:
"Los ingresos para el grupo privado a través de la venta de apartamentos y casas serán de más 4.100 millones de dólares", opina alguien con tanto conocimiento del asunto como el Director de Proyecto de Extensión Urbana Jean-Luc Nguyen. La inversión, 2300 millones de dólares, tampoco es baladí, cabe añadir. Si bien es cierto que en el principado de la Riviera francesa no existe el impuesto de la renta desde 1869 y que un tercio de sus habitantes son millonarios; con un millón de euros sólo se pueden adquirir 17 metros cuadrados de residencia principal. Tan cerca y tan diferente.
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