Les ofrecemos íntegro (y algunas de las aportaciones espontáneas) del Discurso inaugural del Presidente
Manuel Lao que siguió a la bienvenida del legislador madrileño Fernando Prats. Las palabras de Presidente pasaron de la unidad necesaria que debe mantener al sector recordando como ha sido el proceso de venta de CIRSA del que mostró su orgullo por no haber conocido a nadie de Blackstone.
Estas fueron sus palabras:
Señoras y Señores representantes de las distintas Administraciones; Presidentes y Secretarios de las entidades afiliadas a COFAR; Empresarios, Directivos y Amigos del sector del juego.
Quiero darles la bienvenida al Congreso Anual de COFAR, el que hace el número 21, con la misma ilusión y compromiso que les di la bienvenida al primero, en el año 1995.
“Por una presencia sostenible del juego recreativo en hostelería” es el lema que hemos adoptado este año para el Congreso. No representa nada nuevo, sino que resume lo que hemos estado defendiendo durante todos estos años de trabajo incansable, luchando por un modelo de juego recreativo que a algunos les parecía escaso, y a otros excesivo, pero que se ha demostrado que era el más adecuado para los intereses de todos: ciudadanos que juegan o que no juegan, empresarios y administraciones.
El equilibrio ha sido a veces difícil de mantener, pero creo que lo hemos conseguido en buena medida. Miremos si no a otros mercados europeos, en los que los excesos en uno u otro sentido han deteriorado o incluso destruido una actividad de la que, en España, todos nos debemos sentir orgullosos. No nos hemos vuelto locos en ningún momento, hemos dado entrada a los avances tecnológicos que mejoran el sector, pero sin caer en la trampa de revoluciones que son “pan para hoy y hambre para mañana”. Miren si no a Hungría, a Polonia, a la propia Italia, donde los operadores que llevaban muchos años invirtiendo y luchando en el sector lo han perdido todo o casi todo.
Como gestores del juego recreativo en hostelería hemos entendido lo que significa realmente nuestra responsabilidad social: explicar a quienes juegan lo que pueden esperar y no engañarles. Queremos, por encima de todo, que nuestro juego sea divertido, una forma de ocio en la que se busque pasarlo bien, desafiar a la máquina, más que ganar premios de cuantías propias de casinos, bingos o salones.
Este año, dedicamos una parte importante de nuestro congreso a concretar de forma visible y eficaz nuestro compromiso con toda la ciudadanía, siempre en el estricto cumplimiento de las regulaciones, pero no limitándonos a ellas. Queremos ser una industria reconocida por su liderazgo, también, en su compromiso social.
Sé que estáis esperando que comente algo sobre la nueva estructura societaria de CIRSA, empresa de cuya trayectoria durante casi cuarenta años mi hijo Manel y yo nos sentimos muy orgullosos. Hemos trabajado duro día a día para llevarla al grupo de cabeza de las grandes empresas mundiales de juego. Y de las multinacionales españolas en general. Y lo hemos conseguido, con la ayuda de todos: reguladores, socios, clientes, proveedores, amigos. Os estamos de verdad muy agradecidos.
Nuestros principales logros no han sido los balances y cuentas de resultados, porque son sólo la consecuencia de haber sabido conjuntar un equipo humano de una enorme calidad y absolutamente comprometido. Es esto lo que ha valorado por encima de todo el fondo de inversiones que se ha fijado en nosotros y nos ha hecho una oferta que por encima de todo preserva y permite dar continuidad a nuestro trabajo de tantos años.
Quiero expresar a Joaquim Agut y a todo el gran equipo humano de CIRSA mi gratitud, mi felicitación y mis mejores deseos de que sigan haciendo crecer este gran proyecto empresarial, ahora con nuevos horizontes.
¿Y yo? Manuel Lao nunca dejará de ser un emprendedor. Manel y yo somos empresarios, y lo vamos a seguir siendo, aunque en coordenadas distintas, evidentemente.
Seguiré a vuestro lado para todo lo que podáis necesitar, pues por siempre seguiré siendo vuestro amigo.
Muchas gracias, de corazón.
Este fue el discurso original al que Manuel Lao aportó algunas de sus distinguidas frases:
“El proceso de venta empezó hace 15 años cuando mi hijo de dice “ya tenemos bastante, la avaricia rompe el saco” hasta que llegamos aquí donde se ha hecho todo y nosotros no hemos conocido a nadie de Blackstone”. Añadió, “
el día de la firma nos invitaron a comer, pero dijimos, ‘nosotros, los funerales, los mínimos’… No conocer a nadie de Blackstone es un éxito…. Cirsa tendrá continuidad y Cofar también: Seguid con Cofar porque al final se nos olvida todo lo que hemos conseguido”.
Y continuó hablando de la operación de venta: “
Joaquim ha hecho muy bien la operación y mi hijo ha sabido llevar a un equipo. Yo no he querido estar. Han luchado noche y día para llegar a un buen acuerdo. Pero seguimos necesitando Cofar. Lo digo ahora que no estoy en el sector del juego. Siempre seguiré siendo vuestro amigo”.
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