En esta sección, vamos viendo empresas, productos, servicios y negocios innovadores de la industria del juego, tanto a nivel presencial como online. Uno de los casos más interesantes surgido por parte de emprendedores españoles, es el caso de la empresa Playfulbet.
Me acuerdo, que cuando mi amigo
Javier Escudero, siempre ávido de conocer novedades, me lo enseñó. Lo primero que hicimos es preguntar a la DGOJ si esto era legal. Y sí lo es, nos dijeron que sí. Pensamos en hacer lo mismo en otros verticales, pero uno no siempre tiene la oportunidad para dedicarse a ello.
Playfulbet fue fundado por
Pol Ruíz y desarrollado enteramente en la aceleradora
Itnig. Posteriormente, se incorporó
Cristian Planas como CTO, liderando la parte técnica, quien ya no está en la empresa. Desde sus inicios, tuvo un crecimiento meteórico. En sus primeros tres meses de vida, alcanzó los 25.000 usuarios. Consiguieron su primera ronda de financiación en 2013, por una cantidad de 100.000 euros, mediante accionistas de
FxStreet y otros socios minoritarios. Pasaron entonces de 60.000 usuarios a 900.000 en tres meses y han seguido creciendo de manera espectacular.
Playfulbet es un juego social de pronósticos deportivos sobre eventos reales, pero con monedas virtuales, completamente gratuito. Es un complemento perfecto, para el competido mercado de las apuestas deportivas. Se posiciona en un nivel de iniciación mucho más lúdico, donde muchos jugadores, o simplemente aficionados al deporte, prefieren divertirse sin dinero y disfrutar de la interactividad como en una red social. Es un juego idóneo para aquellos, que rehúyen el poner en riesgo su dinero, pero seguramente alguno de los buenos pronosticadores se pasará al lado oscuro, a las apuestas con dinero.
Playfulbet está poblado de rankings, gamificaciones y una funcionalidad muy fácil y visual. ¿Pero de qué viven? se preguntará alguien. Pues ahí reside la innovación disruptiva de este proyecto. De hecho, muchas de las innovaciones se basan en la llamada capacidad de asociación, es decir, en conectar ideas diferentes. En este caso, se trata de juntar apuestas deportivas, con aspectos sociales, con un modelo de negocio freemium, pero donde las compras se sustituyen, con una devolución de las afiliaciones para los clientes. La moneda virtual, sirve para comprar bienes de consumo o tarjetas prepago, que se encuentran en una extensa tienda personalizada por países. Más se gana, cuando más se acierta en los pronósticos. Y siempre se da una carga inicial sin coste. Cuando uno escasea en moneda virtual, debe cumplir con unas promociones comerciales a escoger, entre las cuales están incluso las de casas de apuestas deportivas con dinero real. Estas promociones son afiliaciones de Playfullbet, de las cuales un porcentaje se revierte al usuario. Este modelo de negocio ya fue puesto en marcha por
Beruby con gran éxito. Adicionalmente, Playfullbet, admite diversos formatos publicitarios.
Precedente y pionera, de las apuestas sociales fue la empresa
Beticius nacida en 2011, pero que tuvo que cerrar en 2013, habiendo alcanzado 400.000 jugadores.
También han surgido otras empresas similares. Un caso muy notable es el de
Betrocket, fundada por
Joan Álvarez,
Mario Barreiro y
Carlos Beneyto, que se ha hecho fuerte en los torneos sociales de apuestas. Han ido cambiando su modelo de negocio, ya que al principio como en
Sportsplays.com, daban premios en metálico. Quizás a través de otra pregunta que hicimos a la DGOJ, se vieron obligados a cambiarlo, por ser incompatible con la regulación. Hoy en día, es una empresa pujante, en la órbita de
Wanajump, la aceleradora del
Grupo R. Franco, con mentores del calibre de
Carlos Blanco.
Este es un mercado en claro desarrollo. Recientemente se acoplado a este una nueva empresa llamada,
Betsuites.
Hace un tiempo, en la entrega de premios de
Jdigital,
Sacha Michaud me presentó a la gente de Playfulbet, y posteriormente los fui a visitar a sus oficinas de la aceleradora
Itnig. Me encontré con
Pol Ruíz, que fue en su día colaborador de
PokerStrategy. Se nota que es un jugador de póker en como toma sus decisiones. Mi impresión es que les queda mucho por hacer. Lo mejor, es que aún a día de hoy, siguen creciendo y lo más importante, que siguen pivotando…