Lacarra comenzó informando sobre las acciones desarrolladas desde ANESAR, entre las que destaca la formación de empleados, acreditación de locales, así como un esfuerzo informativo importante. De igual forma, destaca que se trata de proyectos enfocados siempre en una visión del disfrute que supone la actividad del juego; actividades pensadas hacia clientes, empresas y empleados
Ante los reclamos de la sociedad dijo
“hemos sufrido manifestaciones y las vamos a seguir sufriendo, tenemos que entender que no le podemos gustar a todo el mundo”. También, expresó
“los detractores o haters son un signo de normalidad, debemos aprender a gestionarlos”. En este sentido, resaltó el comportamiento ejemplar de los empleados en estas situaciones adversas.
En relación a las demandas desde la administración y de la sociedad en general, afirma que siguen en aumento, por lo que opina que se deben dar respuestas, es así que para un mayor control de acceso y
“evitar fallos humanos debemos incorporar medios técnicos que garanticen este control”.
En cuanto a recientes medidas desde el regulador, explica que desde 2019 no existen comunidades autónomas sin normas de planificación y además se han incorporado suspensiones o moratorias. En 2020, se han propuesto suspensión de autorizaciones en Baleares y País Vasco. En conclusión, son tiempos muy intensos para el sector y de acuerdo con la exposición de Lacarra, será clave que puedan participar en el diseño de las leyes que se consideren necesarias.
Además, es muy claro en diferenciar el cierre por fallos en el negocio, algo que sin duda forma parte del juego; pero, algo muy distinto es el cierre sin fundamentos por parte de la administración, porque ponen en riesgo inversiones ya realizadas, recaudación de impuestos, así como las familias que dependan de esos ingresos. También, hace hincapié que en el caso de que algo así llegara a suceder,
“no podemos dudar en buscar todos los instrumentos legales a disposición”.
En referencia a la regulación de la publicidad, reitera que es algo que han pedido del sector en repetidas oportunidades a lo largo de los años.
Según Lacarra,
“el prohibicionismo no ha demostrado ser una solución”, en otras palabras, puede traer como consecuencia que los clientes cambien a otros canales o entornos no legales, que incluso pueden beneficiar a
“prácticas deshonestas y organizaciones criminales”.
En lo que respecta a la Responsabilidad Social, es algo que afirma el sector debe tomarse muy seriamente, y enviar mensajes que demuestren que están trabajando en ello. En este sentido, subraya que
“no tenemos que tener ningún miedo” y agrega
“debemos reivindicarnos como empresas, aprovechar la visibilidad para mostrarnos de muchas maneras”.
Lacarra también dedicó una parte de su intervención a la autocrítica, y considera de suma importancia
“estudiar códigos de autoregulación y una máxima exigencia de cumplimiento”, a la vez que llama a una
“mayor coordinación sectorial” que es una asignatura pendiente, pues si bien afirma que se han hecho muchos esfuerzos, se pueden hacer más en pro de una mejor coordinación de las asociaciones.
Sobre el futuro del sector, afirma que
“la mano tendida y la fuerza del dialogo es el mejor instrumento”. No obstante, asevera que
“ante medidas ineficaces prohibicionistas innecesarias y desproporcionadas no nos podemos quedar callados, no podemos descartar vías de defensa”.
Ya casi para concluir, reiteró que Anesar va a estar ahí porque
“creo que somos la solución para siga habiendo un juego legal; (…) somos la solución para muchas familias que trabajan, somos la solución para que la sociedad esté tranquila; somos la solución hasta para nuestros detractores, para que los ciudadanos que no puedan, ni deban jugar, no jueguen”.
Y concluyó con el carácter y decisión que marcó este día:
“No podemos formar parte del problema, nos tenemos que mostrar y seguir trabajando, lo que siempre hemos hecho. Mirar hacia el futuro y pensar que lo vamos a seguir haciendo”.
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