Great Canadian Gaming, compañía con gran presencia en el mercado de casinos de Ontario, ha solicitado un informe a una consultora de la industria del juego para evaluar los potenciales cambios tras la regulación del juego online. En este sentido, el documento pronostica que el gobierno provincial de Ontario perderá $550 millones en ingresos anuales por los cambios que causará en los hábitos de los usuarios.
Según el informe, la tasa impositiva que Ontario impondrá a los sitios de apuestas en línea es mucho más baja que el porcentaje que el gobierno toma de los gastos de los casinos. Sin embargo, las empresas involucradas en el sector del juego online aseguran que las conclusiones del informe son erradas.
Más específicamente, no coinciden en la suposición de que clientes de casino de repente comenzarán a gastar mucho menos de su dinero en casinos y más en sitios web.
Asimismo, explican que el modelo de "licencia abierta" propuesto por el gobierno dará como resultado que los sitios en línea tripliquen con creces su participación en el mercado del juego de Ontario.
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