El abogado Rafael de Andrés Álvarez, especialista en derecho administrativo, deportivo y de juego, ofreció una lectura histórico-jurídica (1977-2025) para explicar cómo la regulación, sobre todo en publicidad y patrocinio, ha modelado la visión social del juego. Señaló tres etapas, denunció asimetrías entre operadores públicos y privados y reclamó proporcionalidad, evaluación de impacto y "smart regulation".
En la mesa moderada por Ramón Cubián durante el segundo día del Congreso, De Andrés distinguió tres momentos clave. Etapa 1 (1977–2000): despenalización, despliegue autonómico y normalización del presencial con reglas técnicas y fiscales que proyectan control y retorno social. Etapa 2 (1995–2012): auge del online sin marco nacional, competencia desleal y explosión publicitaria; la Ley del Juego (2011), las licencias y la co-regulación estabilizan y salvan patrocinios en transición. Etapa 3 (2012–hoy): crecimiento online y endurecimiento publicitario con planificación restrictiva (distancias, cupos, urbanística) que, a su juicio, favorece al operador público en visibilidad/patrocinio mientras el privado soporta más límites.
El ponente pidió que toda restricción (distancias a centros sensibles, límites de locales/máquinas, depósitos, horarios) se motive con datos, metodologías sólidas y revisión periódica, alertando del riesgo de fuga al mercado ilegal si se asfixia al regulado. Defendió patrocinio responsable, comunicación veraz y simetría de trato público/privado.
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