El holding de Carmen Mateu y Arturo Suqué ha cerrado el ejercicio con ganancias millonarias abarcando diversos sectores de nuestro tejido empresarial; un imperio en el que han acumulado unos espectaculares fondos propios (capital más reservas) de 350 millones de euros.
La diversificación es un rasgo identitario de una de las principales fortunas catalanas, presente en el sector del juego pero también en sectores dispares como el vitivinícola.
Como no podía ser de otro modo, con notable presencia dentro de él; Cavas del Ampurdán ejerce como matriz de una decena de empresas, como Cavas del Castillo de Perelada, Cellers del Pescador, Cims de Porrera, o Invergaming Group e Inverama, cabeceras de sus propios y muy prósperos entramados empresariales. Algunos de ellos son actores principales en la actividad vinculada al juego en territorio catalán y argentino.
Invergaming Group desde hace tiempo ha ostentado casi todas las concesiones administrativas de casinos a nivel catalán; 3 de los 4 que actualmente existen, concretamente. Entre ellos el lucrativo e ilustre Casino de Barcelona, aunque el recinto del Hotel Arts no es tan rentable en sí mismo como para explicar el contraste entre el anterior ejercicio y éste.
Al parecer la diferencia estriba en los 26,3 millones de euros percibidos de sus subsidiarias; buenos números para el clan familiar, que incluye 3 hijos que también aportan lo suyo y que ostentan el 46% de un accionariado bendecido con grandes reservas de fondos propios.
Y cuya diversificación también abarca la producción de fibra de polipropileno, con tres fábricas distribuidas internacionalmente, ubicadas en Portugal, Polonia y Méjico, incluidas en su filial Poligal Global Service. O el Club de Golf Peralada, o Termes Victoria de la Garriga, o Cultius Marins del Delte de l’Ebre. No cabe duda a estas alturas que los herederos del fundador de la conocida fábrica de automóviles Hispano-Suiza tradicionalmente son diversos y rentables. De casta le viene al galgo.
18+ | Juegoseguro.es – Jugarbien.es