Parece la crónica de una muerte anunciada. Los cuatro casinos italianos -Venezia, Saint Vicent, San Remo y Campione- viven una crisis financiera que cada año se agudiza. El principal motivo el cada vez mayor poder de las instituciones públicas: concretamente de los municipios (comune) y de los ayuntamientos (sindaco). La supervivencia de los cuatro casinos existentes en el país no está garantizada a finales de este 2018 y el poker presencial aparece como la víctima propiciatoria.
El impacto que ha tenido el cada vez mayor peso específico de las dos unidades administrativas básica de las las regiones y las ciudades italianas -los comune y los sindicos, siguen llevando hacia la bancarrota a los cuatro casinos existentes en Italia. Analizamos uno por uno la situación de estos establecimientos y cómo está el poker presencial en sus instalaciones:
En
Saint Vicent, ubicado en el pintoresco y exclusivo Valle de Aosta, encontramos el casino más dependiente de las decisiones públicas. Y es que el 99,955% de sus participaciones son públicas, concretamente propiedad de la Región del Valle d’Aosta mientras que el 0,045% pertenece al Comune di Saint Vincent. En este caso, el cierre de la poker room se remonta a 2016 y ahora se está planteando recuperarla de cara a la temporada primaveral y de verano, la época en la que más acción hay en sus mesas.
En todo caso, parece que 156 de los 492 empleados ya no estarían presentes en esta nueva etapa, confirmando que las pérdidas de 110 millones de euros en los últimos 6 años han sido una losa imposible de levantar.
Campione: aunque el cierre está cada vez más lejano, lo cierto es que 2018 se presenta como el año en el que se debe "empezar de cero". Es por ello que el plan de viabilidad presentado al gobierno municipal y que éste veria con buenos ojos sería el de reducir la plantilla un 30%. Y es que la evolución negativa de las visitas en los últimos meses no hace albergar esperanzas sobre el fin de los rumores sobre un cierre inmimente. En 2017 se registraron 672.000 jugadores mientras que en 2016 la cifra era algo superior -711.000-. El futuro de este casino pasa por la entrada de capital asiático que es quien ha convencido a las instituciones regionales de seguir luchando por la viabilidad del proyecto.
En
San Remo parace que la situación mejora y el poker sería una de las partes a potenciar por parte de la nueva administración del casino, que ya ha firmado un acuerdo con PokerStars para albergar varias etapas de sus circuitos en los próximos meses empezando por el PokerStars Megastack que se celebrará en apenas un mes.
Y en
Venecia, mientras el establecimiento tiene el honor de ser el más antiguo del país (este año cumple 380 años) la solución a sus problemas económicos tras 5 años de disputas con los organismos de gestión administrativa de la región, pasa por suspender el convenio colectivo que estaba en vigor desde 2012. Parece que con esta decisión, altamente reclamada por distintos actores que han estado a cargo de la gestión del casino en los últimos tiempos, la esperanza renace y el poker presencial podría volver a sus instalaciones este mismo año.
En todos los casos, en los últimos años el poker presencial se ha convertido en una de las actividades prescindibles. Primero fueron los juegos de cash games y después los torneos los que han ido desapareciendo en
San Remo, después en
Venecia y aunque actualmente la situación pende de un hilo
Saint Vincent y
Campione están discutiendo sobre la viabilidad del poker en sus instalaciones mientras que
Venecia y
San Remo podrían verlo como una actividad imprescindible para recuperarse de unos malos años.
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