El Gobierno de Nicolás Maduro ha difundido una campaña de juego responsable con el lema "Si juegas, hazlo con responsabilidad. El juego debe ser diversión, no un problema".
La acción es promovida por la Comisión Nacional de Casinos, Salas de Bingo y Máquinas Traganíqueles, órgano desconcentrado adscrito al Ministerio del Poder Popular para Relaciones Interiores y Justicia, y busca concienciar sobre los riesgos de la ludopatía y promover hábitos seguros entre los usuarios.
La pieza central de la campaña —un cartel divulgativo— arranca recordando que, como en cualquier actividad con riesgo, lo primero es conocer su significado y sus reglas. Define el juego de azar como una actividad en la que se arriesga dinero para intentar obtener un premio por azar, e insiste en tres ideas básicas: diversión, asunción de riesgo y toma de decisiones frías conforme a las reglas. El mensaje clave es tajante: “El azar no se controla”.
El material enumera normas de juego dirigidas a la población adulta: no jugar si se es menor de 18 años, moderar el tiempo de juego, no apostar más de lo que se puede perder, conocer el juego antes de participar y respetar tanto el establecimiento como a uno mismo. También subraya que el juego es ocio, no necesidad, y no debe usarse para escapar de los problemas personales, académicos o laborales.
Otro bloque del cartel insiste en que los juegos de azar son cuestión de suerte: no tienen patrones controlables, perder forma parte del juego y cada resultado es independiente del anterior. Para quienes identifiquen señales de riesgo, la campaña recomienda reconocer el problema, pedir ayuda, no aislarse, buscar apoyo profesional y evitar el consumo de alcohol u otras sustancias.
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