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XVI Congreso de Juego de Castilla y León

Conclusiones sobre el tratamiento de la Prensa al juego privado... Magistral José Ignacio Cases! Magnífica moderadora Susana Pastor

 
Conclusiones sobre el tratamiento de la Prensa al juego privado... Magistral José Ignacio Cases! Magnífica moderadora Susana Pastor
Desde hace dos días INFOPLAY está en Aranda de Duero cubriendo las incidencias en torno al XVI Congreso de Juego de Castilla y León, cuyo prólogo fue la entrega de la III Edición de los Premios al Juego Responsable.
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Este martes 26 de noviembre, en el Auditorio de la Fundación Caja de Burgos, se celebró la primera jornada del congreso que inició con la inauguración a cargo de Ángel Ibáñez Hernando, Consejero de la Presidencia de la Junta de Castilla y León; acompañado por Raquel González Benito, Alcaldesa-Presidenta del Excelentísimo Ayuntamiento de Aranda de Duero; Máximo López Vilaboa, Director General de Relaciones Institucionales de la Consejería de la Presidencia; y, Roberto Saiz Alonso, Delegado Territorial de la Junta en Burgos.

Entre las múltiples actividades desarrolladas en el marco de este evento resaltamos la Mesa-Coloquio titulada El tratamiento de los medios de comunicación hacia el juego privado, la cual fue moderada por Susana Pastor Pons, Directora General de Tributos y Ordenación del Juego del Gobierno de Castilla-La Mancha.

En ella intervinieron Joaquín Sánchez Torné, Director del Diario de León; José Ramón Bajo Álvarez, Director del periódico Gente en León; y, el profesor José Ignacio Cases Méndez, Doctor en Derecho y director académico de las obras publicadas por la Fundación CODERE.

La primera pregunta planteada a la mesa fue: ¿Cuál es su percepción sobre la actividad del juego en general? ¿Hay alguna diferencia entre juego público y privado?

Al respecto, José Ramón Bajo Álvarez, Director del periódico Gente en León, manifestó que le llama la atención la diferenciación entre juego público y privado; pero, más allá de eso, subrayó cómo se ha promovido una demonización del juego privado, a pesar de los datos que certifican el impacto positivo de este sector para la economía y la generación de empleo.

En la misma tónica se pregunta: ¿por qué el sector público del juego tiene buena imagen si al final es lo mismo? Ante esta inquietud, afirma que el juego busca crear una especie de gran hucha de muchas pequeñas participaciones y a alguno le toca. Y hace un paréntesis muy pertinente… ¡No veo anuncios de bingos o salones, pero sí veo lo de la primitiva!

Por otro lado, comentó que “el juego al final es ocio”, por lo que se trata de “un sector necesario y básico que genera actividad económica, y como tal hay que mantenerlo”. Eso sí, es enfático al decir que los menores no deben entrar a los establecimientos de juego, por lo cual es fundamental establecer las normas y cumplirlas.

Para concluir su primera intervención, comenta que si bien el porcentaje de juego problemático en España es muy bajo, en los medios constantemente se ven los casos extremos. En todo caso, recomienda el trabajo conjunto de administraciones, empresarios, familias y la sociedad en general, para así detectar posibles problemas con el juego sin que eso llegue a una situación dramática.

Por su parte, José Ignacio Cases destacó la importancia de diferenciar el juego en tres, es decir, público, privado y online, pues se rigen por normas distintas sin olvidar que las competencias de la administración son diferentes en todos los casos.

Ante esto, Cases destaca que la supuesta problemática no es más que un conflicto artificial usado como instrumento político. También, considera que hay una división entre “quienes defendemos la libertad y quienes no” y añade que el Estado “no se debe meter en dirigir las conciencias de la gente”.

Por otra parte, no pasó por alto la temática de la publicidad a su juicio agresiva y la tan necesaria legislación. Igualmente, Cases manifestó que no entiende cómo desde el 2011 al 2019 el Estado no ha tenido tiempo de regular la publicidad, aunque dice que no hay gobierno actual o por venir, capaz de cumplir con las medidas que se deben tomar en este aspecto, pues además de los distintos intereses económicos involucrados “a todas las tecnologías nuevas nos ha cogido de sorpresa”.

Igualmente, ante la difusión de algunas decisiones sobre los controles de las casas de apuestas en los planes de la posible coalición de gobierno, aclara que son medidas de imposible cumplimiento, pues la competencia de esos establecimientos es de las comunidades autónomas.

Ante estos planteamientos, Joaquín Sánchez Torné dice no cree “que haya diferencia entre juego público o privado” y opina además que le “da igual quien gestione los premios. Al final quien compra es una persona física”.

No está de acuerdo con que sea un problema político, sino social. Y subraya que “la política lo que tiene que hacer es regularlo”, al igual que hace con aspectos relacionados con el alcoholismo o drogadicción. En este sentido, considera que “el Estado está para proteger a sus ciudadanos” y una de las formas para protegerlo es a través de la regulación.

Sánchez no está de acuerdo en que haya que prohibir la publicidad, y agrega que en caso de que esto sucediera “los periódicos no seríamos capaces de vivir de nada”.

Por otro lado, resalta que no cree que el actual alarmismo social en torno al sector del juego sea “un problema a causa de lo que hacemos los medios de comunicación”. Al respecto, considera que “los periodistas somos reflejo de la sociedad” por lo que “si la sociedad se preocupa por alguna cuestión, nosotros lo contamos” y agrega que es trabajo de los medios darle el espacio necesario a todas estas preocupaciones.

Seguidamente la moderadora invitó a los ponentes a responder ¿Consideráis adecuado el tratamiento de las noticias en torno al juego? ¿Es un fiel reflejo real de la sociedad o hay un excesivo alarmismo?

José Ramón Bajo inició expresando que si bien puede coincidir con Joaquín Sánchez en que la decisión de jugar es privada, la competencia es en diferentes condiciones.

Por otra parte considera que se está magnificando todo lo relacionado con las apuestas online, sin embargo le preocupa “la facilidad con que se puede acceder al juego”.

Del mismo modo, explica que “es imposible que se pueda controlar todo y que todo sea perfecto”, si bien se puede pedir más regularidad para hacer todas las inspecciones que sean necesarias, pero hasta ahí.

El profesor Cases aprovechó su intervención para reafirmar su exposición inicial y decir que todo responde a un interés político. Del mismo modo, llama la atención sobre “quien defiende la libertad o quien supuestamente en nombre de ella, tiene una vocación totalitaria y quiere controlar la vida de los ciudadanos”.

En la misma línea, dice “no soy enemigo del Estado, he sido su fiel servidor. Pero si la ley lo permite, debe permitir que se juegue”. Y agrega que hay que respetar que los ciudadanos hagan lo que quieran libremente.

Ahora bien, el Estado central no ha hecho nada, excepto crear un organismo muy competente y válido como la Dirección del Juego, quienes no han podido sacar los decretos para regular la publicidad; pues se trata de un negocio que mueve tanto dinero, que no hay estudio capaz de medir las altas sumas que giran en torno a la publicidad online.

Volviendo la mirada a la pregunta planteada, Joaquín Sánchez afirma que no se venden más periódicos por publicar noticias relacionadas con personas con juego problemático. Coincide con el profesor Cases en que no hay justificación para que no se haya promulgado una ley de la publicidad.

Ahora bien, considera que “la regulación excesiva será negativa, pero la no regulación también lo es”. En este sentido, resalta la importancia de que el Estado debe proteger a las personas que sean relativamente débiles y estén en situación de riesgo de caer en adicciones.

La moderadora, a propósito de la opinión del profesor Cases propone la pregunta ¿Pensáis que la prensa podría transmitir artículos u opiniones para educar un poco a la población en esos temas?

Joaquín Sánchez afirma que, en el medio que representa, tratan de dar las claves para resolver el problema que sea y siempre con ánimos de educar. Sin embargo, destaca que “es el lector quien tiene que decidir cómo afrontar la noticia de manera responsable”.

En este sentido, hace un llamado a abandonar posiciones hipócritas y afirma que usualmente el lector tiene dos formas de percibir las noticias, y la diferencia radica en si se siente protagonista o no. Es por ello que afirma que se debe ser responsable.

Para concluir esta mesa, Susana Pastor Pons, Directora General de Tributos y Ordenación del Juego del Gobierno de Castilla-La Mancha planteo la siguiente inquietud: ¿Qué actitud pensáis debe tener la empresa del juega desde el punto de vista de los medios de comunicación?

José Ramón Bajo Álvarez, Director del periódico Gente en León, opina que los datos oficiales en torno al juego deben hacerse valer, y hace hincapié en las 450 empresas o los 2000 puestos de trabajo de manera directa, todo este en el caso de Castilla y León. Recomienda entonces a los empresarios presentes “poner en valor lo que hacen y generan”, pues se trata de una actividad que “genera ingresos e ilusiones a una buena parte de la población”.

En el caso del sector privado destaca además dos aspectos, en primera instancia que el juego presencial privado no genera ingresos publicitarios; y, en segunda instancia, que se trata de “una actividad empresarial más”, por lo que “no es un delito tener una empresa de máquinas o bingos”. Para el sector del juego público, considera que quizás sea interesante buscar “una utilidad social para el bote de dinero generado por los españoles”.

Desde otra perspectiva, el profesor Cases expresó que el sector debe cumplir con todas sus obligaciones sociales para “no ofrecer ninguna puerta abierta a la crítica”, sin embargo dice “no creo que tenga que comunicar nada, tiene que luchar por la reputación y ofrecerse a la sociedad limpio”.

En la misma línea afirmó que “salir a comunicar es muy peligroso”, porque está el riesgo de que se haga mal o el receptor lo entienda mal. Para ilustrar esta afirmación, hace referencia a la importancia del uso del lenguaje y menciona por el ejemplo el empleo fácil, banal e indiscriminado del término ludopatía el cual no debe confundirse con juego problemático.

Cases hace referencia también al llamado de atención de la OMS sobre el alto porcentaje de personas con problemas relacionados con videojuegos y que este organismo lo iguala a la ludopatía, pero que curiosamente no es algo muy mencionado en los medios.

Por otro lado, si bien ratifica que no se puede permitir ni un solo menor en un solo salón, mencionó a la Operación Arcade, como un éxito del sector si se parte del hecho que se consiguieron 28 menores en 1800 locales inspeccionados; pero no deja de llamar la atención sobre los datos de la operación y la necesidad imperiosa de hacer una clasificación detallada de las características de los menores, pues existe el caso delicado de muchos extranjeros que tienen el juego como modus vivendis.

Joaquín Sánchez Torné fue muy honesto cuando dijo que no sabe “lo que tienen que hacer las empresas”, pero considera que no se pueden “demonizar los beneficios”, pues sin eso “…no hay empleo. No importa el sector que sea”.

Discrepa radicalmente de lo expuesto por el profesor Cases en lo que respecta a los riesgos de la comunicación. En este sentido, dice que “todo lo que no se comunica se vuelve oscuro y, lo que es oscuro, tiene connotaciones negativas”.

Ya para cerrar la mesa, José Ignacio Cases, expresó que para que “haya una decisión libre, se necesita una opinión libre; y, para tener opinión libre, tienes que tener informaciones suficientes”. Sobre este, la moderadora intervino diciendo que “sin prensa no hay información, y sin información no hay democracia”.

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