EL JACKIEPOT: Querido Govern Balear, toca construir, levantar y empujar todos juntos
Foto en una de las plantas del fabricante MERKUR DOSNIHA asentado en Palma.
En nota de prensa de ayer mismo, el Govern balear decía que "se compromete con las entidades sociales a introducir cambios normativos para proteger a los sectores más vulnerables del juego". "Así lo han trasladado el secretario autonómico, Jesús Jurado, y el director general de Comercio, Miquel Piñol, a las entidades y asociaciones reunidas en la mesa de entidades que trabajan con las problemáticas sociales del juego"…
Se trata de una nota institucional donde se dice que la Dirección General de Comercio tiene previsto, en un plazo de dos meses, presentar una planificación de actuaciones en el ámbito normativo. No sabemos de qué se trata, pero nos tememos regulaciones estimadas sobre percepciones y no sobre datos, una vez más... Ya es suficiente, ¿no?
En un momento de zozobra absoluta, de caos, de empobrecimiento, de desesperación, de crisis total.… ¿lo único que atisba el gobierno balear es ahogar y reprimir a una industria digna, hiper regulada, sobre vigilada, ahogada en impuestos, que lleva cerrada meses…?
La planificación de actuaciones que anuncia el gobierno balear para la industria del juego no parece que esté basada en datos reales (¿dónde están esos estudios fiables?); y además ahondará y enquistará más la crisis en familias trabajadoras. Si realmente lo que se quiere es dar prosperidad y crecimiento, se debería estimular a las empresas que dan empleo, pequeñas y medianas empresas, que componen el tejido industrial y que sostienen a la hostelería y a una cadena de valor invisible, pero que sufre por llevar comida a sus hijos todos los días. No es palabrería. Es la realidad.
No es momento de frivolidad. Hay datos. No hay alarma social (como dijo el Director Nacional de Juego) ¿es realmente el momento de aplicar medidas que estrangulan? ¿aún más? En un momento extraordinario hay que dar la talla política. Ser buenos gestores. Cuando pase esta crisis tan terrible que impide ir a trabajar dignamente a los trabajadores del sector del juego, será el momento, quizás.
Cuando nos recuperemos de malvivir y de no estar en el umbral de la pobreza… entonces se habrá dado la talla como dirigente y desde esa atalaya, la de haber permitido el crecimiento, plantearse si las condiciones han cambiado para actuar. Recapaciten. El momento es de cooperar, construir y empujar juntos. Lo decía bien María José Gallardo hace poco, "nos necesitamos todos".
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