En un pleno celebrado el pasado martes, el consistorio ha acordado autorizar estos trabajos pero sin tener que conceder el habitual permiso de obra, ya que la corporación municipal entiende que el proyecto cuenta con el aval de la Junta de Extremadura.
Se espera, por tanto, que en las próximas semanas comiencen esos trabajos de urbanización que afectarán a ocho millones de metros cuadrados y que requerirán una inversión de 120 millones de euros.
¿Cuáles serían las siguientes fases?
Lo primero es urbanizar y, después, dotar de infraestructuras básicas. A este respecto, esta redacción ha podido conocer que hay cuatro anteproyectos ya redactados. Son para el suministro de agua, la gestión de las aguas residuales, los residuos y el suministro eléctrico. Cada una de estas actuaciones requerirá, también, de una serie de permisos que, a partir de ahora, se tendrán que ir tramitando con las administraciones competentes. Esta segunda fase requeriría una inversión superior a los 265 millones de euros. En total, la urbanización de los terrenos tendrá un coste de unos 385 millones de euros.
Por otro lado, todavía faltan por expropiar unas 300 hectáreas de las 1.200 del proyecto, algo que hará la Junta de Extremadura, pero que sufragará el promotor. Leer noticia completa en
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