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Las 5 Razones que explican el fracaso de CARCAJ

Ilustramos el contenido de este análisis con uno de los fotogramas más populares de la película "300" que muestra la épica batalla entre tres centenares de espartanos y el ejército persa en el paso de las Termópilas. ¿Por qué? Pues porque lo que se ve en la imagen casi cubriendo el sol son miles de flechas lanzadas por los arqueros persas; y precisamente MediaPro decidió bautizar a su división de apuestas "Carcaj" en alusión a la caja o funda donde se guardan las flechas que utilizan los arqueros. Y sinceramente, creemos que la misma elección del nombre sirve cómo una buena metáfora para explicar el poco más de un año que ha durado el proyecto.

CARCAJ, un proyecto que nacía en marzo de 2016 con ocasión de un clásico Barcelona - Real Madrid y que cómo vemos en la siguiente fotografía, los arcos y las flechas también hicieron acto de presencia; aunque en esta ocasión a manos de dos ex-futbolistas como Dani García e Ivan Helguera. Apenas un año después, y también en el fin de semana de un clásico, CARCAJ ponía fin a su particular reto, el de liderar un sector de los más complejos que podemos encontrar en la industria, como es el de las apuestas deportivas cruzadas.


Para resumir la idea que queremos transmitir con las alusiones a las flechas: para entrar en el sector del juego online con unas expectativas tan altas, más que arcos y flechas se necesitan -como mínimo- modernos fusiles de asalto automáticos.

Y es que algunas tareas suponen un reto demasiado grande y no se pueden llevar a cabo. Eso es básicamente lo que intentamos explicar a continuación, resumiendo en cinco puntos las razones por las que creemos el proyecto de CARCAJ no ha conseguido despegar.


Ya el propio nombre era arriesgado. Por mucho que CARCAJ sea una palabra universal que se entiende en numerosos idiomas, lo cierto es que hasta aún hoy en día cuesta pronunciar en español.

Así que a pesar de contar con buenos profesionales y poder utilizar las sinergias propias de una gran empresa audiovisual como Mediapro, se antojaba una temeridad el intentar innovar tanto siendo una empresa tan nueva que debía competir con operadores mucho más asentados y con años de experiencia. La fórmula de MarcaApuestas (en cierta medida, uno de los operadores que más se podrían parecer a CARCAJ a priori) parecía mucho más sensata a la hora de contar con el respaldo del gran canal de comunicación que tiene detrás; especialmente al contar con un socio con el know how y la experiencia necesarias cómo Playtech.


Pero el riesgo tomado tanto en el naming como en las campañas de publicidad, no es nada si lo comparamos con el producto escogido para ofrecer al jugador: las apuestas cruzadas. En vez de tratar de brillar en un campo mucho más sencillo como lo hubieran sido las apuestas de contrapartida, CARCAJ optó por ofrecer un producto recién autorizado por la DGOJ como son las apuestas cruzadas en un mercado aún muy verde y donde nisiquiera Betfair había podído "normalizar" la realidad de esta clase de apuestas, ni antes ni después de la regulación.

Evidentemente las apuestas cruzadas eran una de las demandas de los apostadores más experimentados, pero aún hoy en día están lejos de ser atractivas para el jugador medio. La escasa liquidez y la limitación de eventos que ésto provoca dejan a este producto en una posición próxima a la marginalidad.

De todos modos es comprensible que con un imperio mediático del tamaño de Mediapro, se intentara priorizar la diferenciación máxima respecto a competidores con más años en el sector y con evidentes ventajas competitivas; pero lo dicho: por muy modernas y exclusivas que sean las flechas, queda claro que el mercado español del juego online necesita de armas mucho más efectivas para poder competir.


Pertencer a un grupo empresarial tan grande y tan especializado como MediaPro, a pesar de que aparentemente parece una gran oportunidad para complementar y apoyar la actividad de una filial de apuestas deportivas; no es siempre tan bueno como parece.

Cierto que las ventajas competitivas son enormes: contar con profesionales experimentados, con medios de comunicación para darse a conocer, con productoras propias... y sobretodo con información de primera mano sobre cómo tener una buena exposición mediática y cómo promocionarse en el sector audiovisual deportivo. Pero al mismo tiempo, que MediaPro combine el ser canal de comunicación para otros operadores de juego y además operador, hace que frecuentemente esas ventajas se tornen inconvenientes.




Tomar una estrategia de comunicación innovadora y ofrecer apuestas cruzadas podría ser incluso realista, si tienes la garantía que vas a ser el único operador en el mercado o -como mínimo- que tienes opciones realistas de convertirte en el líder de esa oferta. Pero precisamente competir con Betfair no parece el mejor escenario posible para tener una tranquilidad suficiente para ir desarrollando tu plan estratégico con calma y acorde a cómo el mercado va asimilando tu producto tan exclusivo (las apuestas cruzadas).

A pesar de que no se ha optado por entrar en una guerra "a cara de perro" con Betfair, CARCAJ no ha podido competir con un BETFAIR que a pesar de estrenarse con el producto de apuestas cruzadas casi al mismo tiempo que CARCAJ, llevaba ya mucha más experiencia pre-regulación y que además había optado por salir al mercado regulado ofreciendo apuestas de contrapartida.



A pesar de aparentemente haber encontrado una buena forma de diferenciarse -principalmente con BETFAIR-, basando la mayoría de sus acciones más agresivas en ofertas que incluyeran abonos a sus canales temáticos (BEIN Sports), la verdad es que no ha sido fácil contar con una estrategia de adquisición lo suficientemente consistente como BETFAIR, quien no ha dudado en centrarse en promocionar elementos mucho más seguros cómo las CUOTAS MEJORADAS o funcionalidades como el CASH-IN.

Analizando el listado de promociones y bonos ofrecidos por CARCAJ, vemos que básicamente lo que "vendían" era básicamente CARCAJ en general, la experiencia de apostar en un operador de apuestas cruzadas... así que a pesar de haber intentado tener presencia en canales de afiliación, la realidad es que básicamente se han mantenido en un perfil bajo a la hora de promocionar su marca (recordemos en la introducción del texto la presencia de Ivan Helguera, ex jugador del Real Madrid y Daniel Garcia, antiguo jugador del FC Barcelona, que en la práctica son unos embajadores modestos en comparación al potencial que podría ofrecer MediaPro).
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