La Federación de Jugadores de Azar Rehabilitados (FEJAR) ha emitido un comunicado en relación con la Lotería de Navidad 2023, expresando su preocupación por el impacto negativo que este evento puede tener en personas con problemas de juego y ludopatía.
FEJAR destaca la necesidad de implementar un control más estricto de acceso a todo tipo de apuestas, incluyendo la compra de décimos de Lotería o boletos de la ONCE.Actualmente, la inscripción en el Registro General de Interdicciones de Acceso al Juego (RGIAJ) prohíbe el acceso a juegos y apuestas en línea, pero no impide la participación en sorteos de Lotería que se realizan de manera presencial.
La problemática se agrava cuando los números adquiridos resultan premiados, ya que los inscritos en el registro no pueden reclamar los premios. En enero, había 72,696 personas inscritas en el registro, un aumento significativo respecto al año anterior.
Juan Lamas, presidente de la FEJAR, subraya la necesidad de establecer un control de acceso más riguroso y sugiere que se realice una intervención preventiva, informando a la población sobre las consecuencias negativas del juego de azar.
En esta temporada previa a la Navidad, FEJAR observa un aumento en las llamadas recibidas, evidenciando una mayor vulnerabilidad y necesidad de fortalecer la abstinencia en los pacientes afectados por la ludopatía.
Las asociaciones de jugadores rehabilitados enfatizan la importancia de la prevención y educación, instando a las instituciones a tomar medidas para contrarrestar la influencia negativa de la publicidad de las loterías durante la temporada navideña.
La Lotería de Navidad, que representa el 32.8% de los ingresos de las Loterías y Apuestas del Estado, se convierte en un desafío adicional para aquellos luchando contra la adicción al juego, y la FEJAR aboga por una mayor conciencia y regulación para proteger a la población vulnerable.
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