En la 11ª Edición del Congreso de Salones de Juego, celebrado en el Estadio Civitas Metropolitano de Madrid el 6 de junio, Juan Lacarra Albizu, secretario general técnico de ANESAR, presentó una ponencia titulada “Salones de juego. Del relato al dato”, donde ofreció una visión detallada de la trayectoria y desafíos del sector del juego en España.
En su ponencia, Lacarra compartió su experiencia de más de 18 años en el sector, remontándose a los años previos a la crisis financiera de 2008, destacando los desafíos y logros a lo largo de los años. En este sentido, señaló que, a pesar de enfrentar crisis económicas, normativas restrictivas y la pandemia de COVID-19, el sector ha demostrado resiliencia y capacidad de adaptación.
Más adelante, Juan Lacarra reflexionó sobre la importancia de entender el poder del relato político en la percepción pública del sector, mencionando cómo la exposición de datos no siempre ha sido suficiente para contrarrestar narrativas negativas. Ante este panorama, destacó la necesidad de seguir aportando datos objetivos para informar a la sociedad sobre la realidad del sector.
En cuanto a la estructura del sector del juego, Lacarra subrayó que está compuesto principalmente por micro, pequeñas y medianas empresas, con un arraigo territorial y familiar.
Por ejemplo, “prácticamente la mitad de las empresas en Andalucía tienen un solo salón, es decir, una empresa pequeña. Solo el 5 % tienen más de 10 salones. El 87 % de las empresas explotan salones en una sola provincia de Andalucía”, añadió.
En cuanto a la regulación, Lacarra subrayó la complejidad y la constante evolución de las leyes de juego, enfatizando que, a pesar de los cambios normativos, la estructura normativa fundamental permanece intacta.
Asimismo, el secretario general técnico de ANESAR profundizó en diversos aspectos del sector del juego, desde el perfil empresarial hasta el comportamiento de los clientes.
En esta línea, ha puesto en valor la diversidad de empresas en el sector del juego, con una coexistencia de grandes compañías y numerosas pequeñas y medianas empresas arraigadas en sus ubicaciones originales. Según datos recopilados, la mayoría de los salones de juego se encuentran en ciudades y ejes comerciales, con locales de tamaño mediano y una media de 10 máquinas por permiso. En palabras de Lacarra: "La máquina es el core de nuestro negocio".
El análisis del perfil laboral reveló que la mayoría de los empleados en el sector del juego son mujeres, con una media de cuatro o cinco años de antigüedad en la empresa, una edad promedio de 36 años y una residencia cercana al lugar de trabajo.
Por otro lado, presentó a la audiencia que se dio cita en el congreso algunas estadísticas del Reino Unido, en las cual se muestran altos niveles de satisfacción entre los trabajadores del sector, aunque reconoció preocupación por el 20 % que se siente avergonzado de trabajar en la industria.
En cuanto al perfil de los clientes, Lacarra presentó datos de la Dirección General de Ordenación del Juego, que muestran que la mayoría de los españoles participan en juegos de lotería, mientras que el tiempo promedio de juego en salones de juego es de una a tres horas por semana para el 98 % de los jugadores. Además, el gasto mensual de la mayoría de los jugadores es discreto, “porque en un mes el 62% de la gente, en particular, se gastan menos de 10 € y el 32 % entre 10 y 50”.
En otras palabras, el panorama presentado por Juan Lacarra refleja una normalidad en términos de perfil empresarial, laboral y de clientes, y destacó la importancia de mantener bajos niveles de comportamiento problemático en línea con estándares europeos.
En cuanto a la evolución del sector del juego, Lacarra presentó datos que muestran cómo la pandemia de COVID-19 afectó a diferentes modalidades de juego. Si bien hubo una recuperación, el juego presencial no alcanzó los niveles anteriores, mientras que el juego online experimentó un notable aumento en los ingresos.
En cuanto al perfil empresarial, Lacarra destacó que los salones de juego ocupan una posición discreta en comparación con otros subsectores del juego, pero son líderes en generación de empleo.
En relación con la responsabilidad social corporativa (RSC), mencionó diversas iniciativas llevadas a cabo por ANESAR y el sector en general, como programas de formación para empleados y campañas de contratación de personas con discapacidad.
Al abordar los desafíos actuales del sector, Lacarra hizo hincapié en la necesidad de normalizar la imagen del sector y corregir las regulaciones que dificultan la adaptación a los nuevos tiempos. Además, subrayó la importancia del diálogo con otros sectores afectados por medidas regulatorias y el compromiso continuo con la sociedad.
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