España, país de abstención. Corralas de cotilas. Mentideros de porfiadores. Patio de vecinas. Puñaladas traperas. Bulos de cobardes.
España se abstiene. Farsa social. Farsa cultural. Ya nadie cree en nada salvo en sí mismo, y me parece bien porque todo lo demás es mentira. La España real es la que no da la cara.
España, carne de abstenc ión. La Dirección General de Juego se abstiene cuando le llaman de un programa de televisón. La industria se abstiene de contestar cuando le dan bofetadas por todos lados. Y así todo como complemento de la abstención escéptica, vivida y pesimista.
Hoy nos abstenemos de leer, de responder, de pensar, de actuar, hasta de ir a misa. Abstenciones colaterales, mentales, sociales, pasotismo juvenil, victimismo infantil verdadero del pueblo. Y la industria no es ajena.
En la mañana de ayer domingo asistimos al suicidio en directo del partido socialista. Una agonía producida por no haberse adaptado a las nuevas exigencias de un país empobrecido y humillado. Nuevas exigencias que requerían valientes soluciones. Las crisis hay que afrontarlas de cara. Y ahora mismo se cierne sobre la Industria la sombra del martilleo mediático de los peligros de las Apuestas Deportivas, del Juego Online y de las máquinas en bares y Salones ¿Y no vamos a hacer nada más que seguir en la abstención?
Por eso, ANESAR hace bien en ir al encuentro convocado por AZAJER, y dar la cara. Sobre todo después de haber publicado su decálogo de buenas maneras bajo el subtítulo “Enjoy”. Lo celebro. Celebro que lo hagan a cara descubierta. Invitando al jugador a compartir experiencias. Fuera ostracismos. Es una muestra de buena voluntad que no nos irá mal a ninguno de nosotros. Bravo por la iniciativa. Ya sólo queda que hagan apostolado mediático.