InfoPlay
PUBLICIDAD
PUBLICIDAD
Operación Salón

 Rafael Vich, enlace de Policía en Islas Baleares, expone un frío análisis del proceso de inspección

 
 Rafael Vich, enlace de Policía Nacional del Servicio Central del Juego en las Islas Baleares, fue otro de los distinguidos ponentes que participaron en la Jornada Operación Salón, celebrada este miércoles 7 de junio en el Complejo Policial de Canillas de Madrid.
INFOPLAY |
La intervención de Rafael Vich giró en torno a la problemática de la Gestión de Inspección del Juego. En este sentido, puso en valor la intervención pública en materia de juego y explicó que se fundamenta en “razones imperiosas de interés general, como el orden público, la salud pública y la protección de los derechos de los usuarios de los juegos”.

Más adelante explicó el proceso de inspección policial en los salones de juego. Más específicamente, detalló que comienza en los exteriores del local, observando los alrededores y la presencia de personas sospechosas o vehículos que puedan indicar un incumplimiento de las normas. Antes de acceder al interior, se verifican los rótulos o carteles obligatorios en la puerta, como el nombre comercial del salón y la advertencia de prohibición de entrada a menores de 18 años, así como el aforo y la capacidad del establecimiento.

Una vez dentro del salón, corresponde verificar el correcto funcionamiento del servicio de admisión, ya sea a través de la identificación facial o mediante la solicitud de documentación por parte de un empleado. Se realiza una inspección exhaustiva para asegurar que no haya presencia de menores de edad y que las máquinas y utensilios autorizados estén en perfecto estado.

Igualmente, durante la inspección, se solicita la documentación pertinente, como la autorización de explotación del salón de juego, la autorización de instalación de una zona de apuestas y la autorización de interconexión o Jackpot de máquinas. Además, se verifica que las hojas de reclamaciones estén disponibles para los usuarios.

Otro aspecto destacado por Vich es la observación del cartel que informa sobre el derecho de admisión, el cual debe cumplir con la normativa vigente en materia de espectáculos públicos y actividades recreativas. También se revisan las limitaciones interiores de las terrazas de bar.

El enlace de la Policía Nacional hizo hincapié en la importancia de contar con un servicio de control y admisión en los salones de juego, para evitar el acceso no solo de los menores de edad sino de aquellas incluidas en el Registro General de Interdicciones de Acceso al Juego (RGIAJ).

Luego, se dedicó a explicar aquellos aspectos problemáticos que sin duda pueden mejorarse. En primer lugar, mencionó el registro de jugadores. Actualmente, no existe una obligación clara de que las personas que accedan a los salones de juego se registren, lo que dificulta enormemente el seguimiento y control de los participantes. A menos que hayan sido premiados, los jugadores pueden entrar, jugar y marcharse sin dejar ningún rastro obligatorio de su presencia. Esto plantea serias dificultades para cualquier persona interesada en obtener información sobre ellos, ya sea por motivos legales o de investigación.

Además, se han recibido informes alarmantes sobre la práctica de ciertos individuos que prestan su documento de identidad a cambio de dinero, lo que compromete aún más la integridad del registro de jugadores y plantea interrogantes sobre la seguridad y veracidad de los datos recopilados.

Otro aspecto destacado está relacionado con la falta de regulación en cuanto a la instalación y uso de cámaras de grabación en los salones de juego. Estas cámaras desempeñan un papel crucial en la identificación de infractores y en la recopilación de pruebas de posibles daños. Sin embargo, no existe una normativa clara que establezca su obligatoriedad ni los protocolos adecuados para su utilización. Esto representa una brecha en la seguridad y deja un vacío legal que dificulta el proceso de investigación y protección de los jugadores y los establecimientos.

Además, se ha puesto de manifiesto la falta de un criterio unificado entre los diferentes ayuntamientos en cuanto a los horarios de apertura y cierre de los salones de juego. Actualmente, cada municipio tiene su propia normativa al respecto, lo que dificulta la aplicación de una regulación coherente y puede llevar a situaciones de competencia desleal entre los establecimientos.

Para finalizar, en relación con el desarrollo del acta de infracción, Rafael Vich destacó la importancia de utilizar esto como último recurso para garantizar una correcta finalización de la inspección.

El acta debe ceñirse lo más cercano posible al artículo por el cual se levanta, cumpliendo con la normativa establecida. Sin embargo, enfatizó que la predisposición a levantar un acta no es necesaria para una buena gestión. Una inspección seria y firme, basada en las normas establecidas, tiene como objetivo principal la mejora y cumplimiento de la legislación.

El Grupo de Juego cuenta con un protocolo de inspección que se adapta en horarios y fechas alternativas, buscando diversificar sus acciones. Además, se ha replanteado la atención a las personas con juego problemático, otorgando citas telefónicas especialmente en horarios de baja afluencia para poder cumplir con los aspectos de inspección y otros relacionados con el juego.

En cuanto a los autoprohibidos, se ha constatado que las personas acuden a las dependencias policiales darse de alta o de baja, lo que les ha permitido observar una variedad de perfiles, abarcando diferentes edades y procedencias, aunque predominan los hombres jóvenes.

Se ha detectado que algunas personas solicitan darse de alta en el RGIAJ de manera superficial, utilizando un documento diferente al que presentan para acceder al interior del salón de juego. Esto permite que participen en diferentes juegos sin cumplir verdaderamente con la prohibición.

En cuanto a los juegos ilegal y clandestino, hizo referencia a los actos de juego que involucran transferencia de dinero o elementos valiosos sin la correspondiente autorización de la administración. Se distingue entre los juegos ilegales, que se realizan en lugares autorizados para otros juegos, pero no para los que se practican; y, los juegos clandestinos, que se llevan a cabo sin autorización en cualquier lugar no incluido en el catálogo de juegos autorizados.

Por último, se menciona la problemática de los bingos de la tercera edad y los hipódromos, destacando la falta de regulación y las sanciones impuestas en casos de carencia de autorización correspondiente.

18+ | Juegoseguro.es – Jugarbien.es
PUBLICIDAD
   
Información de cookies y web beacons
Esta página web utiliza cookies propias y de terceros, estadísticas y de marketing, con la finalidad de mejorar nuestros servicios y mostrarle información relacionada con sus preferencias, a través del análisis de sus hábitos de navegación. Del mismo modo, este sitio alberga web beacons, que tienen una finalidad similar a la de las cookies. Tanto las cookies como los beacons no se descargarán sin que lo haya aceptado previamente pulsando el botón de aceptación.
Cerrar Banner