Las cajas botín de los videojuegos que no impliquen gasto monetario quedarán fuera del anteproyecto de ley de protección a la infancia en entornos digitales, aprobado este martes por el Consejo de Ministros en primera vuelta.
Se trata de una entrevista concedida a Europa Press por el director de Ordenación del Juego, Mikel Arana.
La norma, impulsada por el Ministerio de Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030, liderado por Pablo Bustinduy, prohíbe el acceso de menores a las cajas de recompensa o 'loot boxes'. Esta medida busca abordar los riesgos y el impacto negativo de estas cajas en los jóvenes que juegan a videojuegos.
"Las cajas que sí entrarían son las que tienen precio, azar y el objeto virtual es intercambiable por otro o por moneda de curso legal", aseguró Mikel Arana, director general de Ordenación del Juego del Ministerio de Consumo, en declaraciones a Europa Press. Arana aclaró que quedan fuera de la regulación aquellas cajas que no requieren pago directo o indirecto de moneda de curso legal para su activación.
Arana explicó que estas cajas botín comparten muchas similitudes con los juegos de azar, ya que poseen un precio, un elemento azaroso y ofrecen premios intercambiables por otros objetos virtuales o monedas de curso legal. "Básicamente, tienen los mismos efectos que los juegos de azar, especialmente en personas de edades tempranas que no tienen ningún tipo de control", subrayó.
Sobre el cumplimiento de esta prohibición, Arana mencionó que una vez que la norma llegue al Congreso y se defina su contenido definitivo, algunas cuestiones deberán desarrollarse reglamentariamente. También indicó que el anteproyecto incluye sanciones por el incumplimiento de la prohibición, aunque estos detalles se definirán posteriormente.
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